En 1911, Robert Delaunay abre simbólicamente sus "Fenetrês" para mostrar la totalidad de su universo colorista. El artista renuncia a sugestionarse ante cualquier objeto, a buscar profundidad, a toda perspectiva.. La obra irradia luminosidad y color... Palpita en sus contrastes..
Al igual que él, necesito "abrirme" y llenarme de aire limpio... No achaco defectos sólo a otros; soy el primero que necesita cambiar...
3 comentarios:
Vaya!!! Ya verdad es que he conocido a poca gente a la que un cuadro le inspiraste tantas cosas y que supiese expresarlas de ese modo...
Tengo un comment tuyo que simplemente me dice 'gracias'. Me gustaría saber qué me agradeces :) Tal vez te gustó mi post :D Ya me contarás.
Un saludo.
A esto me refería yo en otro comentario sobre los cuadros abstractos, algunos tienen colores agradables, en este caso incluso relajantes, pero a parte de eso, sigo en las mismas, no me comunica nada más.
Un saludo
¡Pero Leo, sí se ve un pueblo entero!
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