Palabras, palabras, que cual trenes me llevan a conocer nuevos paisajes

lunes, 6 de diciembre de 2004

Así es la vida....



Estás viendo una obra de Kasmir Malevich -"Caballería Roja"- del periodo 1928/32. El autor fue el mayor "suprematista"; buscaba la supremacía sensitiva y defendía que era innecesario dar testimonio alguno en una obra de arte. El Arte por el Arte.

Para los ideólogos y promotores de la Revolución Rusa los artistas de "las Vanguardias" eran revolucionarios, pues sus ideas y sus obras iban contra el arte oficial y lo establecido. Pero, la Revolución asumió el poder y la Tercera Internacional estableció que "las Vanguardias" eran contrarevolucionarias. El pueblo no entendía sus obras. Los artistas tenían que glorificar los logros revolucionarios de forma clara, apreciable. Y el que no.....

Malevich, que llegó a pensar en un cuadrado blanco sobre fondo blanco, tuvo que "evolucionar". En "Caballería Roja" "limita" la composición a una sucesión de planos paralelos hacia el horizonte; predomina "lo oscuro", aunque hay finos "destellos" rojos, alguno amarillo, azul, siena..; algo de "blancura" al comienzo, en la que "se desliza" un trazo rojo. En el horizonte está la Caballería Roja.. ¡La Revolución entendía, al fín, el arte; gracias a Dios!. Pero ahí empezaba a desvanecerse el "estallido de luz"... Según "miramos más allá", la obscuridad...

¿De qué estoy hablando?. ¿Del poder político?. ¿De toda revolución progresista habida y por haber?. ¿O símplemente de la vida?. Empecé a vivir como ignorante, en la obscuridad; hubo breves momentos de clara felicidad y ráfagas de pasión, pero, ahora que sé, muy poco pero sé, y me baña con su luz la necesidad de aprender, comienzo a entender que me he consumido......

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