Palabras, palabras, que cual trenes me llevan a conocer nuevos paisajes

sábado, 23 de diciembre de 2006

Y mañana es Nochebuena

Y mañana es Nochebuena...
Quienes hayan leído mi artículo anterior están enterados del sentimiento que me impulsa a sublevarme contra las falsedades que admitimos en nuestras vidas y que destacan tanto más cuanto más puros y espirituales son los momentos que vivimos.
Y el primero que obra así soy yo. De ahí mi rabia....
Pero como han escrito muchos de los comentaristas, hay personas que se esfuerzan por vivir con decoro y por mantener el calor de sus hogares. Por no perder sus ilusiones y transmitirlas a aquellos a quienes aman.
Por eso, como ya he dicho en privado a mis íntimos...
Deseo que estos días navideños sean familiares; que nada os separe; que estéis en paz; que os apetezca caminar cogidos de la mano y que os sonriáis..
Que disfrutéis cada instante; que sepáis aceptar con sosiego las tristezas; que la magia de los Reyes Magos prenda y se guarde en vosotros; que vuestro hogar sea cálido.
Y para el futuro... Que cada vez que volváis la vista atrás os deis cuenta de que cada día vivido enriqueció vuestras vidas.
Y así, entendiendo la existencia, se emborrache vuestra alma de alegría..
Permitidme un beso.....

lunes, 18 de diciembre de 2006

Felicidad a fecha fija, porque toca quererse

"Das Ende des Weges"
George Grosz
1913 - Acuarela, carboncillo y lápiz - 29,1 x 22,8 cm
The Museum of Modern Art - New York - USA.

Entre 1.918 y 1.939 se desarrolla en la pintura de vanguardia una fase que se caracteriza por su ideologización, por alejarse progresivamente de la forma y por la búsqueda de la objetividad, pretendiendo alcanzar un nuevo realismo y una expresión más verídica de los temas tratados.

George Grosz nació en Berlín el 26 de julio de 1893. No sólo se dedicó a la pintura sino que fue un ilustrador excelente, que hoy adscribimos al movimiento expresionista alemán, aunque participó en el movimiento dadaista. Estudió arte en la Academia de Dresde, en la Escuela de Artes y Oficios de Berlín y en la Academia Colarossi de París. Es célebre por sus dibujos y caricaturas de enorme carga satírica.
Combatió en la Primera Guerra Mundial, prestando servicio en el ejército alemán. Su obra de aquellos años tiende a reflejar el ambiente de inseguridad producido por la guerra y la locura que se había apoderado de la sociedad europea. Las distintas series de sus dibujos relacionados con las condiciones de vida de la sociedad alemana tras la derrota del Imperio Alemán en dicha contienda aparecieron en las revistas "Ecce homo" (1923) y "Das Gesicht der herrschenden Klasse" -"El rostro de la clase gobernante"- (1921).
Opositor a ultranza del militarismo y del nacionalsocialismo, fue uno de los primeros artistas alemanes en atacar a Adolf Hitler, lo que le obligó a emigrar a Estados Unidos en 1932. Hacia 1936 comenzó a pintar al óleo y adoptó una temática menos ácida, realizando numerosos desnudos, naturalezas muertas y escenas callejeras. En 1938 obtuvo la nacionalidad estadounidense. En vísperas de la II Guerra Mundial su arte adquirió un tono desesperado.
Reconocido como uno de los dibujantes más brillantes de su epoca, destacó también como profesor. Describió sus experiencias artísticas en su autobiografía "Un pequeño si y un gran no" (1946). Nombrado miembro de la Academia de las Artes de Berlín oeste en 1958, volvió a su patria natal a comienzos del año siguiente. Murió el 6 de julio de 1959 en Berlín.

¿Y...?. Aunque alguno de mis lectores intuirá "por donde van los tiros", otros se preguntarán que tiene que ver la obra que presento con el título del artículo. ¿Estamos cerca de las Fiestas de Navidad, no?. Pues eso.
No esperen leer análisis artístico alguno de la obra. Hoy pretendo provocar, remover sentimientos, quebrar lo políticamente correcto -¡tan asqueroso y miserable, tan cobarde, siempre!-, sacudir a quien se encuentre confortablemente instalado, ... ¡Al asalto de la banalidad y superficialidad de nuestra sociedad!.
Contemplen despacio la pintura... ¿Qué, incómodos?. ¿Deseando "suprimir al mensajero", servidor de ustedes, para que no incordie?. ¿O sienten algo, por poco que sea...?.
La Navidad conmemora la mayor Esperanza del Hombre. El Nacimiento a la Vida de Jesús, para mostrarnos que nuestra esencia es el Amor, el Espíritu. Que nuestro hacer pasa por la generosidad, la entrega, darnos a nuestros semejantes, compartir lo que tengamos sin reparar en lo que nos queda, ...
"Quiero un móvil que el mío ya tiene dos meses y yo ese collar tan bonito de perlas y como no vamos a poner ternasco después de los langostinos que la cena sin champán no es cena y ya me gasté la extraordinaria en los grandes almacenes cuando iluminaron las bombillas en Noviembre y al niño hay que regalarle como hacen los vecinos por Papá Nöel, Santa Claus, San Nicolás, los Reyes Magos y tu madre es una cerda y tu hermano un hijo de la gran puta y una noche es una noche y luego les olvidamos y a la Misa del Gallo que vaya el cura, que yo sólo salgo a El Corte Inglés y se podía ir a la mierda el negro ese que no hace más que joder vendiendo relojes y ¡hala! ahora el mamón del chino con la música y sí tienen necesidades que se jodan y que se vuelven los putos negroschinosmoros a joder la marrana a sus paises y estoy harto de sudacas cagastrones y la niña sale en nochebuena a esnifar con sus colegas a un putiferio, que después el amigo la va a empalar por el culo y el niño, mientras ve porno duro en el oredenador, está tajao perdido por las tres botellas de coñac con heroína que se metió ayer y cómprale un auto bemeuwe para que chafe a los pobres desgraciaos, antes de matarse bien espachurrao el fin de semana y no seas pringao que estudiar es de subnormales, que donde se ganan dineros es traficando o sobornando políticos para hacer casas y no te muevas nunca de tu barrio ní conozcas gente nueva, que hay que ser de los nuestros, que somos diferentes, únicos desde antes de que naciese dios y aprovéchate de cualquiera que no sea de los tuyos, aunque les mates de hambre, que son basura y los de África no sufren, ....".
De verdad..., ¿tienen ovarioscojones para admitir que este tipo de Navidad y de sociedad es tolerable?. Pues disfrútenla...

miércoles, 6 de diciembre de 2006

Mirar, ver, contemplar

No, no es lo mismo mirar que ver ní que contemplar. El español es un idioma rico en matices. Mirar es dirigir la vista, ver es percibir y contemplar es poner la atención en algo. Sí lo pensáis son tres acciones muy distintas.
Se puede mirar sin ver y ver sin contemplar. Soy hombre, o así parece, por lo que me vais a permitir que me exprese como tal.. Se mira a una mujer rotunda, sin ver algo más que sus volúmenes y por ello pocas veces se contempla su belleza.
Y tratándose de Arte dicha distinción adquiere una importancia extraordinaria. Se miran de pasada, y ya es mucho para la mayoría, las obras de ... no se quien, se ve lo que nos agrede y se contempla, con embeleso, el arte famoso.
Deglutimos museos y galerías con el mismo paladar que hamburguesas. "Panoramix ¡qué maravilla!. He estado en Florencia; nos llevaron a una casa grande con piedras de un tal Pitti, que se debió gastar la pasta gansa en cuadros y luego a una Galería, la de los Oficios creo. Un poco cansado; por verlo todo en una mañana no nos dio tiempo a tomar un café". Y eso que no dice que merendaron en Siena y que hicieron pis en Orvieto, antes de llegar al hotel en Roma.
Bien es verdad que muchas exposiciones están diseñadas para admirar y no para contemplar, debido posiblemente al valor de las obras exhibidas, que obliga a protegerlas de los visitantes, de manera que muy pocas personas pueden contemplarlas con la cercanía y atención que merecen.
Por otro lado, ante el analfabetismo de muchas generaciones, el Arte ha sido utilizado por diversas instituciones, como la Iglesia Católica, como vía de adoctrinamiento de las masas, lo que ha producido cierta confusión en determinadas obras, que son vistas más por su significado religioso que artístico, de modo que la religión condiciona su análisis.

La Pieta
Michelangelo Buonarroti
Basílica de San Pedro del Vaticano

Es una obra sobradamente conocida de un artista famosísimo. Seguro que durante vuestros estudios, en alguna revista, en el cine, ...., la habéis mirado. ¿Y qué habéis visto?. Deteneos aquí un tiempo, pinchad la imagen y abrirla a su máximo tamaño. Contempladla...
Dicen que soy un provocador. No tanto. Sólo soy alguien, cobarde y débil, que necesita aprender cada día y por eso expone alguna de las cosas que pasan por su cabeza, esperando que otras personas refuten o maticen sus ideas y enriquezcan así sus conocimientos y personalidad, pues quien ofrece lo distinto a lo propio aumenta nuestro saber y nos hace ver que la riqueza del Hombre está en la compleja variedad de la especie, en la diferencia y no en una uniformidad unitaria castrante, antihumana.

Miremos pues.. Es una talla en mármol de bulto redondo y punto de vista frontal. Lo primero que llama la atención es su composición piramidal; fijaros.. La unión de la cabeza de María con la de Cristo, en una alineación, y con el hombro derecho de este, en otra, dan lugar a las aristas derechas y desde la cabeza de María hacia su mano y el pie izquierdo por un lado, y hacia la rodilla derecha de Cristo, por otro, a las aristas izquierdas (acostumbraros a utilizar el punto de vista de la obra y no el vuestro, pues evitaréis confusiones).


Sigamos. Se aprecian tres volúmenes compositivos: El superior -tronco y brazos de María-, el central o intermedio -cuerpo de Cristo- y el inferior -piernas de María-. Y, en mi opinión, cada uno mantiene su unidad espacial, con independencia de su ubicación con respecto a los restantes; así, el antebrazo y la mano izquierda de María forman parte del superior, y el antebrazo y la mano derecha de Cristo del intermedio, pues no cabe que su situación rompa la unidad conceptual de la figura.
El artista utiliza el cuerpo de Cristo tanto para separar como para contrastar. Como separador corta horizontalmente el cuerpo de María en dos espacios verticales, evitando una estilización excesiva del conjunto, a la vez que envuelve con la caída de sus piernas y de su cabeza a su Madre, consiguiendo agrupar en un solo conjunto espacial ambas figuras.
Y, a la vez, Michelangelo dialoga con su obra.. Establece un contraste evidente entre la suavidad de la piel, tersa, lineal, desnuda, de Cristo y las ondulaciones de la ropa de María y del manto sobre el que reposa el cuerpo del Crucificado.
Sorprende el cuidado tratamiento superficial del cuerpo de Jesús; ¿es este el de un hombre abofeteado, escupido, azotado, lacerado, ...?. La piel brilla, tersa, vívida... ¿Y las ropas?; a poco que fijemos nuestra atención sentimos como se forman los pliegues del tejido, oímos su roce.. En ambos casos hay clasicismo; tanto en la cuidadosa y proporcionada talla del cuerpo como en la naturalidad de la caída de los ropajes.
Pero también juega con la luz.. Jesús, en su desnudez, es Luz, que refleja y a la vez emana de Él. Mientras, las ropas de María generan una gran cantidad de sombras y claroscuros. Comienzo a oír la voz del artista.. Dialoga con nosotros...
Sigamos mirando.. ¿Os parece que la escultura está petrificada?. Creo que no.. Se mueve. Contemplad la mano izquierda de María.. Mirad las imágenes que preceden, luego este detalle.. El antebrazo se desplaza hacia su izquierda, despacio.., mientras la mano se abre con delicadeza.., en un gesto tranquilo, como sí quisiese llamar nuestra atención y al mismo tiempo preguntarse y preguntarnos ¿qué puede hacerse?...



Y Cristo.., ¿está muerto?. ¿O simplemente duerme, ya tranquilo?. ¿Qué os dice?. Creo que Cristo está Vivo.. Siempre está Vivo. Otra cosa es que cerremos los ojos a la Vida y no queramos ver lo evidente.
A punto de levantarse.. Sus pies buscan apoyo en la tierra.. Caminará hacia nosotros..
Michelangelo, artista y hombre, no se resigna al silencio. Como todo artista verdadero habla a través de su obra. Y lo hace de la mejor manera que sabe; con las manos, si, pero no con letras sino abriendo el mármol para nosotros.



El Arte grita. Todo artista clama por sus manos. Y se esfuerza en contarnos lo que siente, aun sin saber a veces que es lo que siente. El autor está en su obra; se interpreta a si mismo y se entrega a nosotros. Pausemos nuestra vida.. ¿A qué tanta prisa, sí muchas veces no sabemos cual es nuestro destino?. Contemplad...

¿Y María?. No parece la madre de un hombre de 33 años, ¿verdad?. Es joven, podría decirse que poco más que una doncella. ¿Qué siente?; ¿sufre?, ¿espera?, ¿se resigna?.. ¿O cree que Jesús duerme?. ¿No os parece más bien que está velando el sueño de su Amor?.
No hay diálogo entre ellos; no mira a los ojos de su Hijo; no intenta apresar su imagen para guardarla en su corazón.. Parece más bien que aguarda, presintiendo que el Hijo vivirá para siempre.
Fijaros en su boca.. En su perfil, sereno, en el que casi parece que apunta una sonrisa.. Asombraros ante la delicadeza con la que su mano recoge el cuerpo de Jesús.. ¿No creéis que con su gesto nos pide algo?: Sssss, dejadle descansar, que reposa mi Bien...






















Michelangelo es hijo del Renacimiento, amante e intérprete del mundo clásico, de su belleza, de su equilibrio.. Pero no sólo eso. Por ejemplo, en esta obra toma del norte de Europa la representación del cuerpo muerto sobre el regazo. También es hijo de su tiempo y es hombre. Y vive sus pasiones. Pasará su vida intentando resolverse...
Por eso cabe preguntarse: ¿Y Jesús?. ¿Quién es aquí Jesús?. Muchos comentaristas hablan de la belleza clásica de esta obra.. ¿Clásica?. Mirad su David...; deteneos en su fortaleza, en sus manos poderosas... Y ahora contemplad a este Jesús de Michelangelo..

¿Es clásica esa perilla? ¿Romana, griega quizá..?. ¿Y ese bigote, suave, acariciante..?. ¿Es esa la cara de un hombre que ha sido atormentado de una manera atroz?. ¿Donde están sus heridas, los desgarros, las marcas de las espinas?.

¿Es esa cara hermosa, lánguida, sonriente, satisfecha, la del Crucificado?. ¿Revela fortaleza el escorzo del cuello?. O más bien tenemos ante nosotros al amante florentino... Aquel que fue parte del sueño de un hombre de 23 años...



Llegados aquí, os pregunto y me pregunto: ¿Qué estamos contemplando?. ¿Y quién puede saberlo?. ¡Y qué se yo.....!. Que cada uno busque la respuesta en su corazón...

* La galería fotográfica en blanco y negro pertenece a un trabajo de Robert Hupka