Navidad

Quienes me siguen, gente que ante mi asombro está interesada en conocer mis ideas y opiniones, tienen noticia de que la Navidad que me hacía soñar quedó atrás, oculta en la niebla cual Brigadoon. Alguna amiga ha procurado que sienta la Navidad, pero los sentimientos no atienden a razones; van a su marcha y recorren caminos desconocidos.

Este año que está dando sus últimas boqueadas y nunca mejor dicho ante lo que está cayendo, siento que algo ha variado. Poquito, muy poquito, pero si, algo ha cambiado en mi interior y les aseguro que deseo con todas mis fuerzas que me arrastre. Todo comenzó con la lectura de este artículo. Sonreí, sentí calorcito..; muy poco, pero ocurrió.

También es costumbre por estas fechas felicitar la Navidad y desear un feliz año entrante. Es deprimente contemplar las felicitaciones que se hacen; desgana, obligación, peloteo puro y duro, esas cosas.. No quiero ser así; busco trasladarles mi deseo de que vivan la Navidad con Esperanza, que la contemplen con los ojos de un niño chico; el día cinco de enero salgan a la calle al paso de la Cabalgata de los Reyes Magos del lugar donde estén y caminen despacio contemplando a los niños...

Así que he estado discurriendo como felicitarles la Navidad y se me ha ocurrido aprovecharme de un maestro; si señor, de un maestro, que así se identifica el mismo. Maestro; bella palabra. ¿Saben?, ese oficio me huele decente. Creo que le gusta serlo. Lo intuyo, pues no le conozco; no le he visto en mi vida. Solo he visto sus fotos y creo que las puedo utilizar para mi felicitación.

La Navidad es un canto a la Esperanza. Dios no solo viene a nosotros, sino que se hace Hombre. ¿Se dan cuenta?. ¿Quién soy, quién eres tú que lees, que.. Él Quien Sea, El Todo.., ¡se hace cómo yo, cómo yo!. Entonces... ¿cómo tiene que quererme para semejante cosa, para estar a mi lado, para decirme quien soy siendo como yo?. Canta el Alma desde el inicio del tiempo, cerrados los ojos, baila alzándose hacia las estrellas..

Por eso he elegido la belleza para felicitar la Navidad. Quiero que se sientan cual derviches sumergiéndose en el Cosmos mientras mis palabras les van envolviendo con lo que la mirada de Rafael E. Morales ha descubierto ahí, a dos pasos, a nuestro alcance. Porque, queridos amigos, si hacemos un esfuerzo descubriremos que nos rodea la Belleza. Y tanta maravilla no puede ser nunca mera casualidad. Nunca.



Adeste Fideles
Belleza. Busquemos la Belleza y nos acercaremos a Dios. La verdadera Navidad es Belleza. Limpia y pura. Estamos rodeados, inmersos en Belleza. ¡Queramos verla, por favor!. No nos dejemos arrastrar por la Nada y entreguemos alma, corazón y vida a la Esperanza.

Fuente del Museo del Agua
Lanjarón

El agua.. Canta. Detente y escucha. Ten paciencia. Busca sosiego el espíritu; una gota que cae, un pájaro que trina... Camina despacio sobre sólidos maderos. El alma se serena.

El Chorreón
Portugos

Gotas de agua se van reuniendo.. El agua es vida y esta, verde Esperanza. El musgo recoge las lágrimas de la experiencia. Y la madera se abre, como debe hacerlo el corazón, mostrando la fuerza ocre de lo vivido.

Color
Lanjarón

Amarillo, púrpura azulado, verde y verde limón.. Modestia y sencillez al final del espectro. Aura de una hada pequeñita que se esconde al no tener donde nadar. Aromas en el viento...

Bajada a la Fuente Agria
Portugos

Una fuente. Las hojas muertas. Desciende la vida en busca de su fuente, camino del último paso..

Colores
Portugos

Brilla el rojo, luce el amarillo. Sangre y oro. Penetran siempre entre nuestras luces lanzas dolorosas. Pero gracias a ellas madura la existencia y crece el Hombre.

Museo del Agua
Lanjarón

Al cabo, por patrimonio, todo lo vivido. Lo menudo y lo importante, grandes hechos y minúsculos méritos. Pasan los años, quedan sólidos fundamentos. Unas pocas hojas caídas, cual cabellos dorados perdidos cuando alcanza el otoño.

¿Si tanta delicia está a nuestro alrededor a diario, qué no será cuando nuestro Padre que estás en los Cielos viene a nosotros?. Se acerca el tiempo de Navidad. No llores. Confía. Y sueña con ese niño chico que si nace, nace esperanzado. En tu Felicidad.

Os deseo a todos los que lleguéis a esta modesta página que paséis unas Navidades sencillas y francas que os permitan sentir el corazón y comprender la existencia, que no es otra cosa que un camino que nos permite superar nuestras limitaciones y crecer como Hombres.

Un fuerte y largo abrazo