Palabras, palabras, que cual trenes me llevan a conocer nuevos paisajes

domingo, 29 de octubre de 2006

Meme

Hace un tiempo una mujer brava y tierna me mandó un meme. No sé sí lo escribo bien, pues no sé bien lo que es. Y por lo que adivino no deja de ser una especie de cadena, que no es precisamente algo que me entusiasme.
Mi aversión comenzó cuando siendo niño me encontré bajo la puerta de entrada de mi casa un papel que decía que o copiaba una docena de veces la oración a San Pancracio, y la distribuía entre las gentes, o me sucederían cosas terribles. Hoy parece que es suficiente encender virtualmente una velita...
Más tarde, descubrí que usando cadenas y pirámides hay quien se forra a costa del prójimo. No tengo prevención alguna contra el ganar dinero -¡ójala todos podamos ser ricos, qué pobres es bien fácil!-, pero si contra quien utiliza la esperanza de los necesitados.
Y no le contesté a Saf... Aún me duele. Mucho. Mi preciosa y tierna...
Hace poquito otra mujer excepcional me ha endilgado otro meme. Y además, cumplir sus condiciones es muy arduo para mí; se trata de responder a unas preguntas mediante títulos de canciones.
¡Ahí es nada!. Hace poco me preguntaban que música prefería.. ¡Me quedé mudo!. Carezco totalmente de oído y nunca he sentido mayor atracción por la música. Algunas canciones, escuchadas en momentos especiales de mi vida, activan mis recuerdos y me hacen soñar; cierto tipo de interpretaciones me relajan. Pero no más. Lo primero no deja de ser una forma de utilizar la música como un interruptor...; activa la ensoñación y dejas de oír.., hasta que se termina la canción y retornas a la realidad. Y lo segundo lo consigue con más facilidad mi manicura dándome masaje...
Pero no. Quiero que prevalezcan los deseos de ciertas personas sobre mis apetencias. Necesito que sea así; me place.
Así que me puse a ello... ¿Y cómo lo hago?. Por un momento creí que sería imposible. Sólo tenía clara una respuesta: la de los cantantes. Ahí no tuve duda alguna. ¡Tengo grabado en el alma su LP "Only you"!.
Luego ha sido muy fácil. He buceado en mis recuerdos y en los temas de algunos cantantes que me han hecho soñar, para elegir la letra que mejor respondía a la cuestión.
Perdonad mi torpeza; pero os confieso que estoy satisfecho...

Cantantes elegidos: The Platter's
¿Eres hombre o mujer?: Old man river
Descríbete: Entre mis recuerdos
¿Qué sienten las personas acerca de tí?: Ne me quitte pas
¿Cómo describirías tu anterior relación sentimental?: Smoke Gets in Your Eyes
Describe tu actual relación con tu novio o pretendiente: Sabor a mí (a tí)
¿Dónde quisieras estar ahora?: Rain in The Summertime
¿Cómo eres respecto al amor?: Imagine
¿Cómo es tu vida?: My way
¿Qué pedirías si tuvieras un sólo deseo?: Amores
Escribe una cita o una frase sabia: Esos locos bajitos
Ahora despídete: (Con) Un sorbito de champán

martes, 24 de octubre de 2006

La trampa de la vivienda

Indice de referencia de los préstamos hipotecariosCon la masa hay que tener cuidado; se cree lo que le dicen y luego pasa lo que pasa..

miércoles, 18 de octubre de 2006

Mediterráneo

He vuelto al Mediterráneo. Hacía unos quince años que no me acercaba a su orilla y antes lo hice sólo en tres ocasiones. Del Mediterráneo me gusta casi todo, pero hay algo que me resultó siempre insufrible: su turismo.
Ya he dicho en algún artículo anterior que me gusta viajar y eso requiere tiempo. Un viajero no pretende visitar Italia en un "tour" de diez días, ní va al Louvre por la única razón de ver la Gioconda tras su restauración. Sabe que hay mucho, muchísimo más, y que en lugar de madrugar para ver -que no conocer- la mayor cantidad de monumentos -¡qué parece que les guste hacer las visitas del Jueves Santo!-, hay que vivir con sosiego.
Es menester observar como viven los naturales del lugar, probar sus comidas, tratarles y entender que las obras de arte, los paisajes, .., en fin todo lo que se nos ofrece, carece de sentido si dejamos de lado el conocimiento del país y sus gentes.
Por eso nunca aprecié la costa mediterránea. Me quedé siempre junto a mi Cantábrico, en pueblos que se diferencian poco de un mes a otro, conviviendo con personas del lugar y a las que trataba un año si y otro también.
Mis obras de arte eran muchas veces mis sueños, que echaban a volar en cualquier sitio y, por que no confesarlo, largas tertulias nocturnas luego de haber comido con placer y en maravillosa compañía.

Así que he vuelto al Mediterráneo, pero procurando evitar sus turistas. He elegido un pueblo de pescadores, donde puedo ir al pósito, donde sigue habiendo flota propia y donde, aunque hay turistas, se come y se bebe con decencia.
El día de mi llegada estaba nublado, lo que me hizo recordar los despertares de mi abuelo, que cuando le preguntábamos desde la cama como amanecía, contestaba: ¡Muy bueno!; luego, al comprobar la espesa capa de nubes sobre la mar, aclaraba: ¡Muy bueno, para pescar bonitos!.
En la playa había "cuatro y el de la guitarra", así que me puse el bañador, atravesé impávido aquella soledad y me metí en el agua..., que más parecía caldo que agua salada, pero en fin.
El Mediterráneo es revoltoso como pocos, cuando le da, pero normalmente es cachazudo, lo que le resta encanto para bañarse, pues bien es peligroso o bien es calmo en exceso. Mis baños preferidos son en mar abierta y con buenas olas, estudiando resacas, sabiendo que la mar es infinitamente más fuerte que tú y que no se puede ir contra ella sino acompañarla. Me gusta batirme con la rompiente de la playa, bucear y pescar pulpos a mano.
Así que..., me puse en posición de supervivencia -en la que flotas sin esfuerzo y con la cabeza fuera- y me dediqué a contemplar a los paseantes de la orilla... Gente curiosa esta; ellas creen que andando rápido recuperarán lo perdido tras los partos y ellos.., ¡ay ellos!; ¡redios, qué feo es un ciudadano en calzorras!.
Había algo de mar de fondo, así que después de nadar y bucear un poco salí; me sequé caminando, que nunca me gustaron toallas ní reglas playeras, como aquella de la digestión.. ¿Saben?; es sensacional caminar mojado y en bañador entre personas con jersey. Y no me tomen por tonto o loco, que sí hay que abrigarse soy el primero que lo hace, pero ocurre que me disgusta hacer cosas porque toca..
¿Nunca han paseado en un soleado día de otoño?; toca ponerse algo, pero en realidad no es necesario. Sólo los hipocondríacos, ansiosos del resfriado, disfrutan abrigándose cuando no hace falta. ¡A la mierda con lo que toca!; vivo y viviré según lo preciso y nunca según lo convenido.
Más reconfortado seguí mi rito playero; o sea, nada de tostarse al sol, que además no se veía. Todos los marineros que he conocido tienen la piel bien curtida por los vientos y la bruma salada, y no por espatarrarse cual san Lorenzo en la parrilla.. ¿Se han fijado?; ¡qué pringue!. Se untan de grasa y luego, vuelta y vuelta.. ¡Y hala, pataquí patallá!.
Como les decía.. Aperitivo. Después de un baño, pincho de tortilla. ¿Y un blanco de Rueda?; aunque tampoco le hago ascos a un vermut con ginebra.. Ní a unas rabas.. Ní a unas anchoas de Santoña, mi pueblo.
Y nada de estar de pie; el aperitivo -como la vida toda- se degusta, despacio, mirando, charlando.. Y eso se hace mejor sentado, cómodamente dispuesto.
Y el aperitivo cumplió su función, así que nos fuimos a comer a un restaurante del puerto. Descubrí que preparaban cup de cava y lo bebimos durante la comida. Nos sacaron en unas fuentes los pescados que habían comprado la tarde anterior en el pósito y elegimos una lubina de alrededor de quilo y medio, que nos prepararon a la sal. Mientras llegaba, dimos buena cuenta de unas almejas a la marinera -con una salsa más suave que la habitual de mi tierra-, una fuente de pescaditos fritos a la andaluza y otra de mejillones -mordejones en mi pueblo- al vapor.
Una excelente crema catalana, quemada en la mesa, y un armagnac dieron paso a la sobremesa, que fué excelente pues aparecieron unos amigos que no esperábamos y montamos una buena tertulia.
A las seis de la tarde me retiré, pues había pedido a la masjista del hotel que me diese un tratamiento relajante, para luego irme a la sauna y al jacuzzi, con la compañía no buscada de un británico, coloradito cual camarón cocido, que se agarraba como un poseso a un cubo de hielo en el que estaba la botella de cava que se fué bebiendo.
Liberado de las tensiónes propias de un prejubilado pitopáusico, me arreglé y nos fuimos a cenar. Algo ligero, suave, intrascendente, que ya saben ustedes que soy persona moderada.. Una crema de nécoras, una ensalada de rape alangostado y un entrecot; de postre, brie y cabrales. Lo normal.
Luego salimos a tomar café y un helado, que los tienen muy buenos. Y para terminar nos fuimos a un local de copas -no sé llamarlo de otro modo- donde comencé con un "Mojito", seguí con un "Caipirinha", una "Piña Colada" y así.. ¡Qué quieren que les diga!; están muy en boga, pero no tienen nada que hacer al lado de un "Dry Martini" -estilo sir Winston Churchill-, un "Americano" o un "Negroni". Le pedí al barman un "Gin Fizz" -a mi manera- con clara a punto de nieve y el hombre se esmeró..
A las tres de la mañana, bien bañado, comido, masajeado, bebido y charlado me fuí a soñar con mis amores...
Y así han sido mis días en el Mediterráneo...

Bueno.., también ha habido dos momentos muy desagradables. Distintos, pero.. quizá no tan distantes. Sucedió uno la tarde anterior a nuestra marcha. Estábamos a punto de entrar en el hotel cuando oimos voces; nos detuvimos y volvimos la vista...
En el paso de cebra próximo estaba una pareja que se alojaba también en el hotel. Ella no creo que tuviese aún los treinta y él, cuarentón; el fulano -calificativo demasiado honorable- ya nos había llamdo la atención por su gesto desabrido y nula sociabilidad. Tenían dos niños, uno de unos dos años y el otro de alrededor de cuatro..
Ella, empujando la silla de uno de los niños, aprovechó una pausa de la circulación para cruzar; el bípedo de su marido, algo distraido, se quedó en la acera..
"¡¡¡¡Quién te ha dicho que cruces!!!!, ¡¡¡¡vuelve aquí inmediatamente!!!!, ¡¡¡¡no puedes hacer nada sí yo no lo digo!!!, ¡¡¡¡vuelve ahora, ya!!!!... La mujer se quedó paralizada.., pero se quedó donde estaba..
El animal de él soltó con rabia la silla de su hijo, que se desplazó hasta el borde de la calzada y allí quedó sin guarda, y cruzó a grandes zancadas hasta donde estaba ella..
Aquello era una especie de gorila -de tres cuartos de quilo- avinagrado y vociferante. Ella, no sé sí por prudencia o temor, no decía nada...
Nos fuimos para él una mujer que necesitaba una muleta para andar -de nuevo ellas, tan bravas como siempre- y un servidor, dispuesto a arremangarle un par de hostias -discúlpenme ahora, pero les engañaría en cuanto a mi sentir sí escribiese otra cosa-. No durmió en el hotel esa noche.
Durante buena parte de mi vida he sido un profesional de la violencia. Me asquea. Y sí es contra seres indefensos o aprovechándose de la debilidad de alguien..., me torna medio loco. Sólo quien la ha catado siente el odio que envuelve. Con ella no valen filosofías ní razones. Hay que vivirla para sentirla. No puede contarse.

A la mañana siguiente, cuando salía de mi habitación para bajar a desayunar, ví avanzar hacia mi a un guardia civil a paso de carga.. He trabajado muchas horas con ellos y mi apellido se repite varias veces en la escalilla del Cuerpo, así que me dispuse a lo que fuese menester..
De golpe, giró y entró en una habitación... De allí salían demudados una pareja de empleados del hotel; les pregunté.. "Una mujer que se ha querido suicidar; se ha subido al balcón y sí no es por el guardia..". ¡La madre...!, pensé inmediatamente en la mujer maltratada.. ; pero no, era una chica joven que viajaba con su padre y que ya había intentado suicidarse anteriormente.

Sobre el suicidio quizá les hable algún día, pues hace años busqué su compañía.. Ahora quiero dejar aquí una idea sobre el maltrato, que no es cosa de hoy en día -aunque sí lo es la publicidad y el regodeo que le dan para ganar dinero los programas basura televisivos, que tanto hacen para que más de un desquiciado asuma que "así es como hay que tratarlas"-. ¿No les parece que al primer maltrato, por leve que sea, hay que cortar por lo sano?. De nada vale aguantar. ¡Ní un solo instante!. Y por malas que sean las condiciones materiales en que quede la persona maltratada, peores serán las que sufra quien ve pisoteadas su dignidad e integridad.
Ánimo, ánimo...

domingo, 8 de octubre de 2006

Cena notarial

El sábado fuí de boda. Y antes de seguir confesaré que cada día me siento más lejos del "circo" en que se han convertido. Oyendo, con los ojos cerrados, la fórmula que manifiesta el consentimiento matrimonial, me quedé en suspenso..
¡Impresionante!. ¿Se han parado a pensar el compromiso que encierra?. Entrega total al otro y de por vida... Para discurrir durante horas. ¡En fin!.

Para cenar, mi anfitrión había dispuesto una mesa notarial. Gente seria los notarios, pero no cenando.. Nos pasamos el condumio relatando anécdotas de clientes, comenzando por "Maruja" y su necesidad de traducción registral...
Hubo tres anécdotas muy simpáticas, que quiero compartir con quien me visite...
La primera se produjo en el acto de otorgamiento de capitulaciónes matrimoniales de una pareja, que, como muchas personas cuando se enfrentan al lenguaje jurídico, se aturulló y no comprendió nada de lo que se les decía.
Cuando se les preguntó cual era su régimen matrimonial, ambos se miraron, agacharon confusos la cabeza y, al fin, el hombre dijo en voz baja:
"Pues sí va bien, dos a la semana. Aunque sí tuve viaje, sólo los domingos."

La segunda ocurrió en el acto de firma de una escritura; el otorgante manifestó que no sabía leer ní escribir, por lo que en lugar de firmar deseaba poner su huella genital...

Y la última sucedió en una habitación de un hospital. Como habrán comprobado, el trabajo de una notaría suele acumularse, por lo que las actuaciones fuera del despacho es preciso hacerlas en el menor tiempo posible.
El caso es que cierto notario de Valladolid fué solicitado para el acto de otorgamiento de un poder por un anciano que estaba hospitalizado. Cuando llegó a la habitación, su cliente no estaba visible, pues se encontraba en el baño...
El tiempo pasaba y el enfermo -con un proceso gastro-intestinal- no salía, por lo que el hijo de este, ante las protestas del notario, le dijo:
"Tranquilo, que se lo soluciono ahora mismo". Y antes de que nadie reaccionase, abrió de golpe la puerta del baño, de manera que el compareciente, que estaba sentado en el trono, quedó a la vista...
"Proceda señor notario, proceda". Ante semejante desafío, el notario respondió con gallardía y, en voz bien alta y a pie firme, formalizó lo debido, ante el asombro de quienes pasaban por el pasillo de la planta, que veían a un fulano trajeado diciendo cosas raras a una pared..

lunes, 2 de octubre de 2006

A petición de los lectores..

¡Qué sorpresa!. Uno intentando escribir algo decente y parece que he dado sin querer con la Piedra Filosofal.
Resulta que por completar un artículo más bien corto, incluí unos pocos ejercicios de cálculo.. Y hete aquí que han gustado muchísimo. Tanto que sí abriese un "blog" dedicado en exclusiva a ello, pienso que tendría éxito. Y además en un lenguaje universal, las matemáticas.
Para ello hay dos problemas muy simples; uno, que no sé como escribir aquí notaciones matemáticas -verán luego que no lo he conseguido con el número pi- y otro que escribo mis artículos para desahogarme, no para hacerles pensar.. ¿O es al revés?.
Bueno, por una vez.. Pero como pueden comprobar en "Mi perfil" tengo otro "blog", más de andar por casa, algo así como un cuarto de estar. Lo que quería era publicar una foto -sacada por mí- de la bahía de mi pueblo, así que..
Y como un buen padre de familia -principio legal donde los haya-, reparto el temario. Sí lo desean, visiten aquel "blog", contemplen la arribada de algunas parejas de pesqueros y escriban un comentario con la solución. Espero no tener que darla yo..