Palabras, palabras, que cual trenes me llevan a conocer nuevos paisajes

miércoles, 23 de noviembre de 2005

La silla...

Una de mis lectoras me pide que escriba sobre la silla..... Asunto complicado este. Y dice que no me "enrolle". Parece que sea alguno de mis familiares, que cuando me preguntan alguna cosa comienzan diciendo: "Sin remontarte a los fenicios, dime ¡oh Kalikatres sapientísimo!, que....".
Cree que hablar -escribir es aún más fácil- de la silla, o de ...., es cosa dificil; yo, por el contrario, opino que hablar es fácil. Lo que es dificilísimo es decir algo con claridad, sin ir más allá de sus justos términos y ciñiéndose a lo que se demandaba. Y sí añadimos la exigencia de no sobrepasar cierto tiempo o espacio, quien lo logre es un artista. En cuanto a saber de lo que se habla no es que sea fácil o difícil; es más cuestión de soberbia y de honradez que de otra cosa. ¡Ah, y de política!.
Os anticipo que de sillas sé más bien poco, pero quiero mostraros algo muy importante: En la WWW hay una gigantesca cantidad de información. Sí tenéis una buena cultura general, aquella que lograban imbuir los maestros de escuela, podréis aprovechar toda esa riqueza, sea cual sea el asunto que os planteéis.
¡A ello pues!. Voy a "dejar de lado" los modelos primitivos -tipo tarugo, tablón y pedrusco- y aprovechando que a estas alturas de curso me encuentro metido de lleno en el análisis del Imperio Egipcio, comenzaré escribiendo sobre los reposaderos de dicha época..

Agradable "chalecito" egipcio para gente acomodada

Los bancos y sillas encontrados son numerosos, desde los trípodes más modestos hasta los tronos reales decorados con materiales nobles. Sus patas son tanto rectas como curvas y la superficie de estas se presenta unas veces lisa y otras torneada. Su forma imita en ocasiones la de los animales, especiálmente en sus extremos a los que se da forma de pezuña o garra.
Desarrollaron una banqueta plegable con patas terminadas en cabeza de oca y cuyo asiento era iniciálmente de cuero, que luego fue reemplazado por uno de madera que se pintaba imitando la piel de algún felino.
Las primeras sillas tenían asiento y respaldo planos, aunque luego para lograr mayor confort los hicieron cóncavos y el respaldo se inclinó hacia atrás; más tarde consiguieron mayor comodidad cubriéndolos con almohadones.


Como véis, la ergonomía está presente desde el comienzo de los tiempos; y no dudo que había colores y telas de moda... Y personajes preocupados por "el colorín".

Para construirlas utilizaron maderas propias del país: Acacia, sicomoro y tamarindo para los muebles más comunes, y cedro, ciprés, enebro y ébano para los más importantes.
Como comprenderéis, el desarrollo de troncos y ramas en el ambiente climático del área del Nilo no era "para tirar cohetes", por lo que las piezas obtenidas no resultaban muy grandes.
En consecuencia, al no tener que soportar grandes esfuerzos en las uniones, desarrollaron una técnica de montaje basada en encastres de diferentes tipos y en el uso de pegamentos, en la que utilizaban en menor medida espigas y clavos.
Para decorarlas recurrieron a taraceas y chapados, a base de maderas, metales preciosos, marfil -normálmente de colmillo de hipopótamo-, piedras preciosas y pastas vítreas -lo que demuestra ciertos conocimientos sobre el vidrio-.
Los muebles más modestos se cubrían con yeso para disimular imperfecciones y luego se pintaban, imitando distintos materiales.

¿Y en las ciudades estado griegas?. Sus muebles más antiguos tenían una gran influencia egipcia, pero fueron desarrollando un estilo propio. Al principio, recubren la madera de menor calidad -que suele ser del país- con materiales más "ricos", como metales, marfil o maderas finas y pintan los muebles con finalidad decorativa. Su estructura es sencilla, tendiendo a la verticalidad, lo que daba mayor finura a las piezas.

Los muebles de la clase media (artesanos, orfebres, mercaderes y demás) no se distinguían precísamente por su ornamentación, lujo y valor. Ya sabéis, la elegancia no es cuestión de dinero..
Había sillas de diferentes modelos: "Difros” o taburetes y “klismos” o sillas de patas curvas, con respaldo ligeramente inclinado y muy cómodas, que serán muy imitadas desde el siglo XVIII -fijaros en el relieve, y en la foto pequeña, y comprobaréis que aún usamos ese tipo de silla- por su comodidad y elegancia.

Pasemos ahora a los romanos, pueblo práctico donde los haya. Culturálmente la influencia griega es muy importante y llegan a copiar algunos tipos de mueble, aunque se distinguen de los helenos por el empleo del bronce.
Los muebles de bronce, cuya decoración es muy rica, a veces se cincelan y otras se recubren, o incrustan, con metales preciosos. También utilizan para revestirlos telas y tapices traidos desde todos los lugares del Imperio, permitiendo la habilidad de sus artesanos y tallistas dar a las patas la forma de las de ciertos animales
Contaban con un gran numero de asientos, taburetes -sin brazos o respaldo-, sillas entronizadas, pesados sillones y lechos para acostarse durante los banquetes.

Modelo utilizado en Pompeya

Encontramos una vez más la silla en forma de tijera, que ya usaron en Egipto y Grecia, a veces plegable y de bronce -bisellium- y que servia de taburete o apoya-pies; en ocasiones, sus patas o brazos eran rematados con un relieve en forma de cabeza de animal.
Había sillas de piedra o mármol, decoradas con relieves o inscripciones, de respaldo cóncavo, y que al contrario de lo que pudiera parecer eran cómodas, y sillones de los mismos materiales rícamente ornamentados, pues estaban tallados en sus laterales con motivos alados o representaciones de animales. En los lugares públicos eran corrientes los bancos -Scamun- de bronce o de piedra.
Pero el asiento mas característico de la época fue el Curul, reservado para personajes públicos, y de los que algunos tienen patas de doble curvatura, rícamente decoradas, con anillas para facilitar su transporte.

Pero, como ya dije, no puedo extenderme mucho. A lo mejor viene "Nina" y me riñe... Así que os voy a comentar brevísimamente dos piezas maravillosas.. La primera es la "Catedra del Obispo Maximiano de Ravena".

Rávena, maravillosa, se convierte en el 540 d.C. en sede de un exarcado en el que el puesto de gobernador lo ocupa el propio obispo.
Citaba antes la existencia de sillones rígidos. Aquí tenéis uno. Fué construido algo antes -alrededor del 533 d.C.-, con toda probabilidad para dar fé del poder, del poder ostentado en nombre de Dios y del Emperador.
De ahí que no os extrañe su nombre -Cátedra-, pues quien ostenta tal detenta poder.. y criterio, mientras que los súbditos carecen del primero y sólo tienen opinión.., sí les dejan.
Está tallada en marfil. Todas esas "tablillas" rectangulares que véis representan al Bautista y los cuatro evangelistas, el anagrama del prelado y motivos naturalistas de estilo alejandrino. Aun siendo muy difícil apreciar en la fotografía la minuciosa labor artística, creo que os podéis hacer una idea de su calidad.
Lamentáblemente faltan alguna de sus tablillas.

Y recordando pérdidas artísticas... ¡Qué amargura!. Porque la silla que os voy a mostrar fué robada en 1979 por Erick "El Belga" y troceada luego para sacarla de España. El resultado fué su pérdida, pues no han podido ser recuperados todos los pedazos. Se exhibe tal cual la contempláis, ya que el restaurador ha sustituido lo perdido por piezas de metacrilato.
Se trata de la Silla de San Ramón, obispo de Roda de Isábena, quien a comienzos del siglo XII desempeñó una auténtica labor de mecenazgo, atrayendo a su diócesis artistas que plasmaron su obra en la iglesia catedral de Roda y otros templos. Los talleres del "Maestro de Pedret" (obra en la capilla de la enfermería de Roda de Isábena), del "Maestro de Tahull" (San Clemente de Tahull) y del "Maestro del Juicio Final" (Santa María de Tahull) son un exponente de su labor.
La silla fué realizada en el siglo XII en una madera durísima, el boj -en este caso traido de Toulouse-, y el trabajo de talla románica es maravilloso.
A los pies de la foto, podéis observar las sandalias de San Ramón y sobre lo que sería el asiento sus guantes.

Hemos llegado a la Edad Media.. No quiero extenderme, aunque tengo abundante "material" para continuar. Termino mostrando una silla de nuestro tiempo; en ella, unas personas sirven de asiento a otras...Espero no haberos aburrido. Buenas noches amigos

17 comentarios:

Anónimo dijo...

Una silla... una obra de arte, sin duda.Ahora es un arte funcional, para mi gusto desaborido.Desde luego las que nos presentas hoy son auténticas joyas que nada tienen que envidiar a creaciones mas grandiosas.Es curioso como los artesanos-artistas de entonces se tomaban muy en serio la jerarquía de las posaderas.
Si decides continuar con la evolución de de este objeto, será un placer disfrutar de la investigación.
Un abrazo

Anónimo dijo...

EL SUEÑO DE UNA SILLA EN UNA TARDE DE VERANO.
¡Oh sublime Kalíkrates!, estoy estoy de acuerdo con tu familia en comparate con el coautor del Partenón, para mi lo eres de la lengua escrita ya que de la hablada ni pum, pero será igual.Si señor ¡La silla!con todas sus letras: s-i-ll-a ¿como puedo guardar este artículo?, como todos los tuyos me ha gustado, pero este más, se te ve una ilusión al escribirlo ... por eso quiero guardarlo ,y si no te contestan es porque no tienen palabras para expresar la admiración que sienten. Una pregunta ¿que significan los puntos suspensivos del prencipio?
Ahora en serío me ha encaantado, pero nunca por nunca me imaginé que te lo tomarías en serio y contestarias; y si señor lo has hecho y como siempre perfecto, no has tenido que irte muy lejos en el tiempo pero cinco siglos A.C. también son años. De todas las sillas que has presentado y descrito me gustan las klismos de origen griego imitadas en el S.XVIII por los franchutes. Imagínate la de cosa que tienen que contar de los Luises franceses y sus favoritas.
Has tenido el detalle de describir las sillas usadas en las civilizaciones y edades preferidas por mi menda, gracias y has escogido las más significativas y utilizado el espacio justo ¡bien puñeta, bien!. No puedo regañarte porque ha quedado perfecto , si te hubieras colado , como soy mayor, jubilada foorzosa, MAESTRA DE ESCUELA, de las que sabiamos de todo y nos casábamos con medicos, menos yo que fue con un galleguiño puñeteiro, podría hacrlo.
Te ha quedado por poner la silla de Van Gogh con el pañuelo, la pipa y el cántaro y las que usaban en el siglo pasado en sustitución del wc actual Gracias amigo mio , aahora en serio eres un tio grande en todos los sentidos . un abrazo. Me voy que llego tarde a mis obras de arte. Adios y GRACIAS NINA

Turulato dijo...

Marian, Nina: Como podéis comprobar he retocado el artículo, pues no me quedé conforme con la primera redacción que escribí, y he añadido alguna imagen nueva.
En cuanto a continuarlo, tengo bastante y buen material, pero no sé.. Quizás canse tanta silla.
Nina sí quieres guardarlo puedes utilizar el enlace final o utilizar "copiar y pegar" para el texto; en cuanto a las fotos, puedes copiarlas una a una, y guardarlas, o utilizar su código fuente.
Los puntos suspensivos del principio significan símplemente que tengo que pensar antes de escribir, pues es un asunto del que no sé mucho. De los temas que domino... ¡temblad oidos insensatos!.
La silla de Van Gogh -y su correspondiente pues no se comprende la una sin la otra-, la eléctrica, la de montar, la mecedora, la tumbona, la plegable, el asiento eyectable de un caza,.... Todo lo mantengo a vuestra disposición.
Y gracias a vosotras.

Anónimo dijo...

Francamente cuando una persona pone interés en contar algo, cualquier tema es bueno y tú acabas de demostrarlo. El tema elegido que parece en principio de poca importancia, se convierte con tu relato en algo interesante, ameno e instructivo; no está mal conocer un mueble al que le tenemos bastante apego y del que la mayoría desconocemos su historia. Espero que no te detengas en esa época y que la continúes hasta nuestros días.
Un saludo

Luis Caboblanco dijo...

yo también espero la segunda parte...¡no nos dejes así Turulato!

Yo voy a contribuir al debate a mi manera; si, en alguna ocasión, estropeais una silla de casa y quereis reemplazarla por una exacta. id a una tienda que está en la C/ Alcalá, de Madrid, entre la plaza de las ventas y Manuel Becerra. En la "Casa de la silla" será muy difícil que no encontréis una réplica, casi exacta...

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Ves com salio la cosa existeen muchas más silla, lachaise longue que nos la hemos comido ,pero un poco más dificil, para mi desde luegolo serría, al final de todas las sillas, una pequeña poesia, porque me imagino , lo doy de seguro que también haces poesia. Las hago yo , con teso está todo dicho. VErás pones los finales,despues pones el tema. haces asi
silla
comió
polilla
calló
asi no dice nada le añadimos el resto (Poesia libre)y diria:
Se sentó en una silla
en la que Perico comió
pero roidaa por la polilla
al suelo redondo calló.
¿ves que facil? te la dedico con mucho cariño, por lo que aguantas. NINA

Anónimo dijo...

Queridiño: Aburrirnos, ¿dices? Hacía tiempo que no sonreía de admiración durante tanto rato.
Excelente. Sin rechistar que lo dice la maestra de escuela...
Espero yo también la continuación, pues una sedentaria como yo, ama profundamente las sillas.
Biquiños. Carmiña.

Turulato dijo...

Carmiña mis artículos no están nunca terminados hasta que los lees..

Anónimo dijo...

¡¡Anda!! Y yo con una silla plegable, que me marca todas las posaderas y me deja dolor de espalda.
Si me lo permites me siento un ratico aquí, que se está muy cómodo.
Gracias por dejar la puerta abierta y permitirme entrar en tu blog.

Un saludo.

Anónimo dijo...

El comentario tuyo se quedó en puntos supensivos.al menos se que estas pensando en hacer la poesia de la silla,
creo yo. Que sea bonita como todo lo que tu escribes.Un abrazo Nina

Ana María dijo...

Yo espero ansiosa su siguiente estudio.
Un abrazo

Turulato dijo...

O sea que queréis saber más de la silla...
No puedo negar que me siento satisfecho, pero estoy preocupado. Fijaros; no tengo el estilo de Caboblanco -que consigue deleitar con lo serio y poner una pincelada de gracia en lo amargo-; ní la profundidad pictórica usando la palabra de doña Maruja -cuyos artículos son cual "paloma" de Picasso, que, en un trazo y sin alzar la mano, nos hace ver la vida-; ní soy capaz de esforzarme como doña Leo -delicádamente minuciosa en la preparación de lo que escribe-; ní tengo manos de poeta como Muralla -que me ha reducido al ensueño con sus palabras-; ní mi preparación sobre lo que os cuento está al nivel de la de Grial -que sabe que ní sé-; ní tengo la paciencia lectora de Dianora o Marían -tan amables conmigo-; ní, en fín, la capacidad de lucha de "Ela Nina" -digna y dulce-..
¿Os dáis cuenta?. Váis a conseguir lo que pocos han logrado: Que trabaje. Os lo merecéis.
Pero como dice el refrán.., "despacio y buena letra".
Muchas gracias

Anónimo dijo...

No sabes el alegrón que me has dado , porque quedarme sin saber que le ocurrre a una silla en una poesía, es mortal. Cada uno tiene su problema, el mio es un problemón, no asustaros es solo que escribo tres páginas sobre la historia del ajo y la cebolla y se me pierden; no se pierden, me dice el jefe que está guardado en tal sitio y yo no encuentro el tal sitio. Voy a intentarlo de nuevo,si lo encuentro os lo mando y si AL LEERLO O INTENTAR LEERLO os parece El Archipiélago Gulag, paciencia y resignación, ya aprenderé a introducirle imágenes y hacer una presentación de lujo. Pero, por fa, aunque parezca una cesta llena de letras ,DADME UNA OPINIÓN ANIMOSÍSIMA.
Es o no es gordo mi problema?que me echen una silla y vereis como la toreo, asi que Turulato o la silla o los leones sin red ni tridente.¿le damos un plazo de entrega?Un abrazo. Nina

Anónimo dijo...

Sr. Turulato, déjese de dorarle la píldora a todo el mundo y continúe con la historia de la silla que ya estamos cansados de estar de pie, dese cuenta que la mayoría de sus lectores somos gente sedentaria y por lo tanto grandes admiradores de las sillas.
Un saludo

Turulato dijo...

"Nina", el próximo artículo la silla. Ya he leido el tuyo sobre el ajo y la cebolla y lo comentaré en tu página. Gracias por tu visita.
Doña Leo, no doro nada. Lo preocupante en mí es el silencio. Me he limitado a declarar lo que opino del trabajo de mis lectores más asiduos. Sí nada apreciase ¿no sería absurdo seguir visitando sus páginas?.
Soy cabezón y repito lo que ya escribí. Sí se tiene mérito en algo se proclama "a los cuatro vientos".
En España se educa incitando a ocultar los méritos, porque se premia a medianías y se ignora el esfuerzo.
Me gusta decir a las personas lo bueno o excelente que veo en ellas. Lo conseguido con sudor merece premio, tanto el del reconocimiento ajeno como, y el primero, el de la propia autoestima.
Y para mí, piropear es motivo de alegría. Y no saber que decir, o calificar de imprudente o de ignorante, una tristeza.
Un beso para las dos

Anónimo dijo...

He visto en tu página,o como se llame que haces una pregunta y además de luto , bueno ese negro es bonio hace resaltar la palabras: ¿que preferís?
y la pones en inglis, tu que quieres que me muera de curiosidad o que me pase un año con el diccionario traduciendo palabra por palabra?. Como en la última cuestión pones puntos suspensivos yo añado: un silencio, un atardecer en el mar.
No digo más, de ti dependerá que muera de curiosidad o no. (soy una cotilla)

Turulato dijo...

No Nina, lo que aparece en inglés no es una pregunta sino el nombre comercial del servidor que me permite publicar la encuesta.
"Free polls from Pollhost.com" es, en español, "Encuestas a su gusto desde Anfitrión del Voto.com"